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Las Cartas de Shamballa

 VOLUMEN 16, Número 52                                                                                                            Diciembre 30, 1994

Amados Seres: 

Mientras este año llega a su final, desearía expresarles a cada uno el profundo y constante respeto de todos nosotros en las octavas de luz. Ustedes son sostenidos dentro de nuestro corazón de amor en todo momento, y nuestra gratitud está más allá de toda medida mientras consideramos cada esfuerzo que hacen para liberar a la Tierra y todas sus evoluciones de los lazos del mal entendimiento. 

Este año ha sido de desafío, mientras luchaban para permanecer centrados dentro de la llama del corazón y contemplaban la plenitud del entendimiento que les ofreció en todo momento vuestro Cristo Interno. ¡Han aprendido que los comandos de la Presencia de “escuchar” y “observar” son mucho más demandantes en su cumplimentación que cualquier otra actividad que pudieran emprender! ¡Sin embargo, en aquellos momentos cuando están plenamente conectados con la luz del Cristo interno, nada parece más simple de lograr! 

¡Amados chelas, el dinámico escuchar y fiel observar son las búsquedas que, a través del proceso del logro, los traerá al hogar hacia el corazón de Dios! Ellos son los puntos de referencia de la maestría, que indican la sublimación de vuestros cuerpos inferiores a la ilustrada dirección de la Presencia YO SOY a través del Santo Ser Crístico. El próximo paso en este proceso de entendimiento es que la sabiduría ganada durante estos tiempos debe ser luego transferida a la acción por los cuatro vehículos inferiores en el mundo de forma, a fin de un entendimiento completo. 

En el comienzo de la Dispensación Cristiana, recuerdo bien el tiempo que pasé con el Maestro Jesús en el principio de la cadena de eventos que lo condujeron a su crucifixión. Él nos llevó al Jardín de Gethsemaní, en donde nos pidió “permancer aquí y observar”, mientras el enfrentaba la plenitud de su destino. ¡Dos veces, él nos pidió observar, y dos veces Yo me quedé dormido! En ese tiempo, no comprendí el principio involucrado. Supe sólo que estuve avergonzado porque fui incapaz de cumplir lo que mi Señor me había pedido. Les advierto en contra de caer en estas mismas trampas, porque ellas son herramientas usadas por la conciencia humana para perpetuar su posición. Sepan que cada esfuerzo que hacen es significativo, y hagan lo mejor. Sean bondadosos con ustedes mismos. 

Hay mucho trabajo a ser hecho durante los años que restan de esta centuria. Mientras enfrentan los desafíos que se encuentran ante ustedes, es muy significativo que concedan suprema importancia al propio tiempo en el Silencio, contemplando y adorando a la propia Presencia YO SOY. Esto los mantendrá sintonizados con la vibración de la Consciencia Crística, la que debe ser la base de cada acción, palabra, pensamiento y reacción vuestra. Recuerden que, cuando buscan al Cristo, él también los busca a ustedes. Vuestro Santo Ser Crístico los encontrará en el jardín de vuestra consciencia, donde todo será hecho claro en el tiempo apropiado. 

¡Los amo, queridos chelas, bendito sea cada uno! ¡Puedan entrar al nuevo año con gozo y gran expectativa! 

Juan, el Amado.

 

 

 

 

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