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Meditación

Céntrense y pongan la atención en el Amado Arcángel Zadkiel, ese gran Ser que representa el concentrado Poder de Invocación. Comiencen a inspirar rítmicamente y al hacerlo transmuten todos los pensamientos y sentimientos del pasado de vuelta hacia la perfección. Una vez hecho esto, traigan de regreso las memorias de los Divinos poderes que una vez conocieron. Sientan la corriente de retorno del Amor de Dios. 

Ahora invoquen al Fuego Violeta de la Transmutación y Misericordia dentro de vuestros seres y mundos. Sientan incrementarse intensamente las llamas hasta que estén totalmente rodeados por un poderoso pilar de Fuego Violeta. ¡Ustedes son UNO con este Fuego Sagrado! 

Con el conocimiento del Fuego Violeta, la energía ahora será traída a ustedes para ser transmutada y purificada. Con este regalo, hagan esto, pero siempre añadan: “Esta energía nunca debe ser recalificada por lo humano”. Tomen unos pocos momentos para hacer este trabajo y recuérdense que, en el futuro, si vuestras palabras no bendicen la vida, entonces no deben decirlas. 

Ahora enciendan el Fuego Violeta dentro de vuestros propios Focos de Luz – sea en el rincón de una sala, un área del jardín o un gran santuario. Concientemente acepten una vez más la realidad de los Maestros Ascendidos y el Reino Angélico, y mientras lo hacen, vean cómo se forma un puente ante ustedes. Sobre este puente los Ángeles de la Llama Azul entran al santuario y liberan todas las imperfecciones de cualquier clase que puedan estar allí y luego los envuelve en la Llama Azul del Primer Rayo de Dios. Cuando esto está hecho, los Ángeles salen para hacer lo mismo por toda vida en la Tierra. 

¡Ahora hay legiones tras legiones de Ángeles de Fuego Violeta entrando al santuario, trayendo con ellos los Sagrados Fuegos de perdón, purificación y transmutación, llenando vuestro mundo con Fuego Violeta hasta que manifiesten el deseo de Dios! Luego – ellos también van a través de todo el planeta para compartir sus regalos con toda la humanidad. 

En ese mismo momento, los Ángeles de la Paz cruzan el puente y pasan su Llama de Paz Cósmica en, a través y alrededor de cada rincón del santuario y de vuestros cuatro vehículos inferiores. Cuando esto está realizado, ellos también expanden su Luz hacia toda la humanidad. 

Colmados con gran paz en vuestro ser y mundo, entienden que este puente – establecido por el propio poder de invocación y sostenido por los decretos – nunca podrá ser removido en tanto ustedes trabajen para expandir los bordes del Reino del Padre. ¡Saben que será usado con frecuencia por estos y otros grandes Seres de Luz! 

Tomen un momento para entender esta gran oportunidad y conéctense con todos los otros Chelas de la Luz en este planeta, a quienes se les ha dado la misma oportunidad. Sientan el Poder, la Sabiduría y el Amor que son liberados desde las Octavas de Luz para toda vida en la Tierra. Sostengan el trabajo que han comenzado, para mantener a toda vida libre, recordando que la intensidad de la Voluntad de Dios no tiene límites, y que puede ser atraída con el poder de la invocación por algunos dedicados chelas que deseen manifestar la perfección para la Tierra. 

Suavemente retornen la atención al tiempo presente y consideren cuidadosamente lo que se les ha dado.