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Las Cartas de Shamballa

VOLUMEN 16, Número 24                                                                                  Junio 14, 1996

 

Amados amigos y co-servidores:

El trabajo que estamos comenzando este mes es una más amplia expansión del trabajo hecho a fines del año pasado cuando el amado Santo Æolus los guió tan magistralmente a través del proceso de purificar los cuatro vehículos inferiores de Shamballa. La razón por la que comenzamos en el mes de junio es doble. Mientras atraemos más protección en, a través y alrededor de Shamballa física y la Actividad de El Puente a la Libertad Espiritual, su energía será suavemente balanceada mediante la cualidad de divino amor. Segundo, también honraremos y reverenciaremos el trabajo que el amado Santo Æolus realiza como Espíritu Santo Cósmico, a fin de asistirnos a aprender más sobre la naturaleza femenina de Dios y luego expresar esa naturaleza al manifestar perfección para ustedes mismos y Shamballa.

¡Amados seres, cuando les digo que son una parte muy importante de El Puente a la Libertad Espiritual para el Planeta Tierra, sepan que digo la verdad! Los bendigo y los elogio por vuestra aceptación del hecho que lo que sienten, piensan, dicen y hacen afecta la armonía y pureza de la plena manifestación de este puente de conciencia. ¡Cuando Yo les digo: “Continúen continuando” quiero decir simplemente que hagan lo mejor posible, usando las sagradas llamas y el conocimiento que tan amorosamente se les ha dado, recordando que a lo largo de todo el sendero nunca, nunca, Yo repito, nunca están solos! 

Sabiendo que aceptan nuestro consejo con gran gozo y sacralidad, también deseo recordarles el Código de Conducta para un Discípulo del Espiritu Santo. A mi solicitud encontrarán los primeros seis preceptos de este código impreso debajo. Aunque difiere ligeramente del original a fin de ajustarse al tiempo y lenguaje actuales, lleva aún el mismo amor y momentum producido por el amado Æolus. ¡Repasando estas palabras durante esta semana y la próxima, cuando el recordatorio del Código de Conducta para un Discípulo del Espíritu Santo sea publicado, llegarán a “conocerse a sí mismos” en una forma nueva y más profunda! 

Sean siempre concientes y aspiren a ser la plena expresión de Dios, dedicando el tiempo y servicio al Primer Mandamiento. 

Aprendan la lección de inofensividad, no inflijan mediante palabras, pensamientos, acciones o sentimientos pena o disconfort a alguna parte de vida. 

No agiten el mar de emociones de vuestro hermano, impensada o deliberadamente. Sepan que la tormenta en que colocan a este espíritu, antes o después, fluirá de regreso hacia las orillas de vuestra propia corriente de vida. Trabajen siempre para llevar tranquilidad y paz a toda vida. 

Disóciense de toda ilusión personal. Si están en lo correcto, no hay necesidad de reclamarlo. Si están equivocados, rueguen por perdón.  

Caminen suavemente a través del universo, sabiendo que el cuerpo es un templo sagrado en el cual mora el Espíritu Santo, trayendo paz e iluminación a toda vida en todas partes. Respétense y hónrense a ustedes mismos y a los demás. En gentil, silenciosa dignidad, reconozcan la gran luz que arde en cada corazón humano. 

En presencia de la naturaleza, absorban la belleza y regalos de su reino en gentil y amorosa gratitud. No hagan nada que pudiera, de alguna manera, quitar este exquisto regalo de Dios para los hijos de la Tierra. 

Como estas instrucciones comienzan con palabras que en efecto declaran: “Haz a otros como deseas que ellos hagan contigo”, permitan que esas palabras sean mis instrucciones para ustedes durante los próximos siete días. Observen concientemente cómo tratan a otros y cómo los otros los tratan a ustedes especialmente después que cambien el modo en el cual se relacionen o respondan a aquellos alrededor de ustedes. Pueda la Llama Dorada de la Iluminación envolverlos mientras hacen nuestras tareas hasta el momento de nuestro tiempo juntos una vez más.

 

Vuestro amado hermano

El Morya

 

 

 

 

 

 

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