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Las Cartas de Shamballa

 VOLUMEN 17, Número 25                                                                                                     Junio 23, 1995

Benditos seres de gran luz: 

Habiendo colmado los cuerpos físicos con la fuerza y poder de Dios, vuelvan ahora la atención a la magnífica belleza de la forma física. Casi todos están deseosos de sentirse jóvenes. Poder moverse en una manera rítmicamente bella, caminar con gracia y brillar externamente con gozo y felicidad puede ser logrado practicando diariamente estos ejercicios y usando la actividad de la respiración sagrada. Como he con frecuencia declarado antes, para ser discípulos del espíritu santo deben ser brillantes ejemplos para toda vida, porque ¿de qué otra forma pueden posiblemente asistir a otros si no se han convertido en “la luz que brilla en la oscuridad?” 

En el ejercicio de esta semana afirmarán la juventud y la vitalidad. Antes de comenzar, por favor visualícense haciendo algo que no han hecho en años tal como subir corriendo una colina, salpicándose felizmente en el océano o quizás, danzando con alegre abandono. Sientan el liberador optimismo de la juventud y sostengan ese sentimiento en el corazón mientras se preparan para comenzar. 

Permanezcan de pie con los brazos a los lados. Tomen una profunda inspiración contando hasta cuatro, elevando los brazos lentamente sobre la cabeza y tanto como puedan moverse hacia atrás de modo que la cara esté ahora mirando al cielo. Sostengan la respiración, inclínándose hacia adelante desde la cintura y toquen el suelo. Exhalen lentamente mientras elevan los brazos una vez más hasta arriba de la cabeza y sostengan la respiración fuera del cuerpo mientras llevan los brazos a la posición inicial. Repitan esta respiración tres veces y luego afirmen con profundo sentimiento: 

“¡YO SOY colmado con la luz que revitaliza cada parte de mi cuerpo. YO SOY una vez más colmado con el chispeante, glorioso, vibrante sentimiento de juventud. YO SOY vivo con el motivante poder de la acción. YO SOY joven. YO SOY joven. YO SOY ETERNAMENTE JOVEN!” 

Durante toda la semana que viene sientan esta sustancia de líquida luz fluyendo por todo el cuerpo. Tomen tiempo para compartir este dorado elixir con otros a través de un suave toque, un amoroso abrazo, o aún una gozosa sonrisa. Sientan esta luz balanceando perfectamente las energías mientras se incrementa la habilidad de ofrecer la llama rosa de amor divino a otros. Sepan que en toda y cada oportunidad de cumplir esta tarea, YO SOY con ustedes, envolviéndolos en mi amoroso abrazo y agradeciéndoles cada esfuerzo que hacen. 

Amor y bendiciones, Æolus

 

 

 

 

 

 

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