VOLUMEN 17, Número 34                                                                                                                                   Agosto 25, 1995

Amados chelas: 

Esta semana marca el cierre del magnificente mes de misericordia y compasión, pero la actividad del fuego violeta continuará resplandeciendo por todo este bendito planeta mientras el Templo de la Señora Kwan Yin permanece abierto durante todo el año. Esta actividad ha causado que ocurran muchos cambios, no sólo en ustedes mismos sino en toda vida. Cuando contemplan lo que ha sucedido dentro de ustedes en este mes creo que rápidamente comenzarán a ver que algunos sutiles y no tan sutiles cambios han tenido lugar. 

La negatividad de otra gente no parece afectarlos como lo ha sido en el pasado, porque ustedes ya no permiten que sus acciones entren a vuestro ser. Ahora ven sus acciones sólo como una oportunidad de practicar el uso de los Divinos regalos de perdón y transmutación, incrementando aún más la propia maestría sobre el ser inferior. Cuando hacen esto también entienden que otros están con frecuencia buscando vuestra compañía, muchas veces inconcientes de sus acciones, mientras vuestra propia presencia en sus vidas los asiste a permanecer más calmos y tranquilos. Todos los signos de dolor y malestar están siendo transmutados y reemplazados por el coraje y la fortaleza así ellos pueden adelantar, encontrando siempre más perfectas formas de expresión, ya ellos sean concientemente conocedores o no de este deseo. Es a través del ejemplo, amados seres, que todo hombre y mujer en este planeta finalmente encontrarán su camino de regreso al hogar hacia el corazón de Dios y reclamarán su divina herencia. 

Durante esta semana que viene les pido que focalicen la atención sobre el sagrado y santo aliento de nuestro Dios Padre-Madre y, trabajando en conjunción conmigo, se concentren en la declaración de respiración de este mes. Así será a través del compasivo amor y dedicación al servicio de todos los chelas y trabajadores de la luz que el entero planeta Tierra será rápida y fácilmente transformado en la Santa Estrella de la Libertad. 

Mientras continúan trabajando con el santo aliento, observen frecuentemente dentro del ojo mental, cómo una profunda llama violeta de misericordia y compasión suavemente comienza a emanar desde el mismo centro de la Tierra, moviéndose veloz y amorosamente hacia su superficie. Cuando esta energía se eleva en lo alto de la atmósfera, una cristalina radiación aguamarina ahora envuelve al planeta en su confortable, sanadora esencia, realizando un antiguo y sagrado servicio para toda vida. 

¡Recuerden siempre mantener esta llama concientemente encendida en vuestro hogar y en cada hogar al que entren, continuando así compartiendo las bendiciones de Dios con todos los miembros de todos y cada uno de los hogares! El amor y la gratitud por vuestro servicio constantemente colman mi corazón, porque ustedes verdaderamente se han convertido en hermanos y hermanas de la magnífica llama de la misericordia mientras por siempre se permitan seguir el sendero del Espíritu Santo como uno de mis discípulos.  

Æolus