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Las Cartas de Shamballa
VOLUMEN 16, Número 26 Julio 1, 1994
Mis Amados Estudiantes de la Luz:
YO SOY el Espíritu Envolvente durante este año y haré todo lo que esté dentro de mi poder para asistirlos a caminar hacia la efulgente Luz de la Divina Presencia. Como saben, hay muchos que observan conmigo. La Amada Junta Kármica, cuya Presencia bendice al Retiro del Tetón dos veces al año para considerar nuestras peticiones, depende de los Chohanes de los Siete Rayos que actúan como custodios de las energías ofrecidas por todos nuestros chelas y otros trabajadores de la Luz que también sirven a la Tierra. Para cumplir con este servicio, todos los Chohanes juntos trabajamos con constancia a fin de estimular, reunir, equilibrar y dispensar todas las energías a disposición en las formas más productivas posibles. Incontables números de los Reinos Angélico y Elemental actúan como nuestros indispensables mensajeros y trabajadores, enlaces de Luz entre todos los involucrados. Cuando piensen en ello, tomen un momento para enviar el amor y la gratitud a los amados Seres de luz, cuyos regalos están siendo constantemente dirigidos hacia ustedes y a toda vida en la Tierra que nosotros también amamos.
Un punto muy importante a recordar es que, como miembros del Reino Humano, pueden llevar dentro de ustedes mismos el potencial y habilidad para actuar como Enlaces de la Luz sobre la superficie del planeta. Esta es vuestra responsabilidad en el gran proceso de fusión que está naciendo en la conciencia de toda vida encarnada.
Mientras ustedes – nuestros chelas – están tomando ciertos pasos de iniciación, nosotros debemos esperar con paciencia para ver si ustedes están en verdad escuchando internamente y siguiendo las enseñanzas que se les dan. Como un ejemplo de este punto, usaré la relación maestro- estudiante. Una vez que a los estudiantes se les ha enseñando la fórmula matemática mediante la cual pueden resolver un problema específico, el maestro debe luego dar una prueba para ver si la fórmula ha sido entendida, recordada y exitosamente aplicada. Nada sobre el progreso del estudiante puede ser conocido por el maestro hasta que al mismo se le da la oportunidad de resolver un problema mediante la aplicación del principio enseñando.
En la escuela de la vida sobre la Tierra, se aplica la misma ley. Se les dan ciertos pricipios de la Ley Cósmica telepáticamente durante vuestros tiempos de sueño y cuando están despiertos. Luego se les presentan las oportunidades y situaciones en las cuales pueden aplicar así las enseñanzas dadas.
Cuando estas situaciones son traídas a vuestra atención, no siempre pueden ser exitosos en el uso de los principios que se les han dado. Sin embargo, antes que permitirse sentir que de alguna manera han fallado, es mucho más productivo considerar esto sólo como una parte del entrenamiento. Yo he notado que todos ustedes están extremadamente alertas y – en muchas instancias – conocen el momento en que falla vuestra aplicación y entienden de inmediato que deben escuchar más atentamente y luego tratar de dominar nuevamente ese punto de la ley.
Les sugeriré un método por el cual pueden dar el próximo paso en el proceso de desarrollar la habilidad de escuchar, oír, asimilar y aplicar los puntos de la Ley Cósmica que se les están enseñando. En el momento que entiendan que han olvidado temporariamente cómo resolver un problema, tomen tiempo para aquietarse y pedir al Maestro interno que les explique la ley una vez más. Luego, estén en silencio y escuchen. A través de este simple acto de preguntar y escuchar, podrán reactivar la lección dentro de la consciencia y escucharla nuevamente, así como podrían escuchar un mensaje recordado una y otra vez hasta que lo entendieron correctamente.
Cuando observo y espero para ver si están escuchando, nuestros corazones están colmados de paciente amor por cada uno, a través de los cuales veremos lo que más requieren, mientras continuamos trabajando con ustedes. Están acercándose siempre más en conciencia a nosotros y entrando más profundamente dentro de la propia maestría. Vuestro planeta depende de ustedes para aprender los Divinos Principios y aplicarlos correcta y consistentemente. Los hermanos y hermanas en la Familia del Hombre dependen de ustedes para que bajen los mensajes y energías de la Gran Hermandad Blanca así pueden ver y entender la ley mientras despiertan, teniendo claros ejemplos de Amor, Sabiduría y Poder que los ayuden a guiarlos en sus elecciones.
Amados, elevo mis manos en bendición y me inclino en profundo respeto ante el gran Maestro Director dentro de vuestro corazón. Mientras continúo mi observación les recuerdo que sepan que son amados.
Dwjal Khul