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Las Cartas de Shamballa
VOLUMEN 15, Número 32 Agosto 6, 1993
Amados Chelas:
Mi gentil Hermano, Kuthumi, me ha concedido amablemente la oportunidad de añadir mi voz a la suya, animándolos a sostener y mantener el momentum de Silencio que está comenzando a florecer en vuestra experiencia de vida.
Las enseñanzas internas de la Gran Hermandad Blanca son por costumbre presentadas a través de las Cartas de Shamballa en forma de Divinos Principios. Esto es hecho por varias razones, sin ser la menor el gran respeto que sostenemos por ustedes en nuestro Corazón de Corazones. La filosofía de presentar la Ley y el Principio en su forma más pura y luego confiar al Cristo Interno del chela para hacer propio uso de estas herramientas, es parte de ese gran Concepto Inmaculado en el cual los envolvemos en todo momento. El hecho de que un chela deba buscar activamente para recibir estas enseñanzas internas y luego cumplimentar ciertos requisitos para sostener su fluir, da seguridad a los Maestros del Mundo que las cuestiones preguntadas por nuestros chelas pueden ser respondidas en el lenguaje claro y plano de la Ley y el Principio. ¡Por cada esfuerzo que hacen ponen a prueba Nuestra Fe en los mismos Principios que les exponemos!
El curso de entrenamiento que ha sido presentado hace mucho por el querido Kuthumi, es un salirse de estos métodos acostumbrados. Esto, también ha sido hecho por muy buenas razones.
Al final del último ciclo de doce meses, a nuestros chelas del mundo se les expuso, a través de El Puente a la Libertad Espiritual, la oportunidad de acelerar grandemente su progreso hacia la maestría, mediante la práctica de las propias actividades fundamentales en las cuales ustedes están actualmente comprometidos. En Noviembre, el Maestro Serapis Bey describió en detalle, la absoluta necesidad de buscar el Silencio todos los días. En Diciembre, Nuestro gran Maestro Maitreya les dio a los chelas un vislumbre de la utilidad del Diario Personal Espiritual.
Se les ha dicho – y correctamente es así - que no hay elementos de “casualidad” o “suerte” en las actividades de los Maestros Ascendidos. En todo momento, Nosotros trabajamos juntos para lograr las máximas oportunidades de evolución posibles para nuestros chelas, de modo que ellos a su vez puedan irradiar la Conciencia Maestra Ascendida hacia las masas aún no despiertas. Cada regalo nuestro, dado a través de ustedes a la humanidad, es seleccionado con cuidado.
El propósito de ofrecer estos regalos al final de cada ciclo, fue a fin de preparar a nuestros chelas para que aceptaran la tremenda radiación del Primer Rayo durante los siguientes meses. ¡Como muchos de ustedes han vislumbrado, un ciclo del Primer Rayo no es una cosa fácil! Es la naturaleza de Mi Rayo el expandir y acelerar la radiación de todos los Atributos Divinos. Siempre, la oscuridad debe huir para hacer lugar a la Luz. En un año del Primer Rayo, la oscuridad escapa con violencia, por así decirlo, y el proceso del cambio involucrado puede presentar un completo desafío aún para los chelas más “preparados”. Por esta razón les ofrecimos la protección del Silencio y los métodos de anclar la Luz que encontramos ser más eficaces en nuestra propia evolución en el mundo de forma.
Cuando se da un regalo, la elección del libre albedrío elegirá que el recipiente sea el factor que determine si ese regalo será puesto en uso de inmediato, o dejado a la espera de alguna necesidad futura. Algo para nuestra sorpresa: los regalos ofrecidos por Serapis y Maitreya fueron largamente ignorados por la mayoría de nuestros chelas. Por favor no tomen esto como una crítica, porque esa no es mi intención. Yo sólo señalo esto de modo que entiendan la razón por qué vuestro actual programa de entrenamiento fue diseñado en un formato más estructurado, con tareas semanales y así todo lo demás. Fue consensuado por la Jerarquía que la creación de un momentum de Silencio – particularmente entre los estudiantes de las enseñanzas internas – era suficientemente importante para justificar el apartarse de nuestros métodos de enseñanza acostumbrados a favor de una marco más explícito.
En cualquier curso de estudios, llega el momento cuando es responsabilidad del estudiante poner en acción los principios aprendidos. Ahora es tiempo para ustedes, nuestros chelas, demostrar la fuerza y determinación de vuestro Cristo Interno, para continuar buscando el tiempo en el Silencio cada día. Ustedes saben por experiencia, que es mucho más fácil seguir las directivas y tareas de un Maestro, que iniciar, expandir e irradiar tales lecciones por uno mismo. Sin embargo, como señaló Kuthumi, la meta final de cualquier programa de entrenamiento es que el estudiante se convierta en el maestro. Esta es siempre Nuestra meta para ustedes. A fin de enseñar, se debe estar tan inmerso en lo interior y familiarizado con el material del curso hasta que el mismo sea parte de la propia naturaleza.
Mientras se mueven en la demostración de la maestría de los principios que se les han presentado, sepan que se les ha dado toda la información necesaria para ayudarlos a superar cualquier obstáculo que puedan encontrar. Tomen tiempo para revisar el curso de entrenamiento en su totalidad. Se les han dado las herramientas que les ayudarán a re-educar los cuatro vehículos inferiores, lo que es probablemente lo más esencial del trabajo preparatorio a ser logrado. Se les ha mostrado la importancia de la Llama de la Unidad, para unir las energías de los cuerpos inferiores. Estos principios – la purificación y la unidad – los capacitarán para comenzar de nuevo en algún momento que se sientan deslizarse dentro de viejas rutinas de conciencia.
¡Les deseo el bien a cada uno! ¡YO SOY con ustedes en todo momento, envolviéndolos en Mi Amor, Fuerza y la Sabiduría de la Primera Causa de Dios – la Perfección para toda Vida!
¡Así es, Amado YO SOY!
El Morya