VOLUMEN 14, Número 24                                                                                  Junio 12, 1992

Mis Amados Seres: 

Ha sido pensado – y enseñado – que todo entendimiento espiritual está libre de costo. Esto es sólo otra creación de la conciencia humana. ¡El conocimiento espiritual  se le imparte a un ser humano en la exacta frecuencia de intercambio iniciado por el mismo ser! Esta frecuencia de intercambio es lo requerido por cada individuo y está basado en sus propios esfuerzos para liberarse de la esclavitud de la conciencia de la raza en la cual ha entrado. El costo de la iluminación está bien documentado, pero poco entendido. 

El costo es que ustedes pongan vuestro todo en el Altar del Santo Ser Crístico dentro de la sagrada y secreta Cámara del propio corazón. Lo que mora en el interior debe ser buscado en el interior. ¡Debe ser buscado en el Silencio – el sagrado silencio! 

Aquellos que escuchan están haciendo lo mejor a este respecto. Continúen, porque ningún esfuerzo hecho en Nombre de la Presencia de Dios YO SOY queda sin recompensa. La recompensa del que busca en el silencio es el encuentro de la Sagrada Cámara. Entiendan amados Seres, esta Cámara está protegida de toda intrusión de la conciencia humana. Esta es la razón por la cual es tan difícil encontrarla. 

Una vez hallada, es aún más difícil permanecer dentro del Sagrado Silencio. ¡Sin embargo, es digna la búsqueda, porque aún una breve visita en la cual experimenten el Silencio de la Presencia de Dios YO SOY – Omnipotente, Omnisciente y Omnipresente – será suficiente para iluminar vuestro sendero para siempre! 

Yo he dicho para buscar el Silencio. ¡Escuchen! Aquellos que escuchen Mi voz obedecerán. 

¡Aquiétate y sabe que YO SOY Dios!

¡Aquiétate y sabe que YO SOY!

¡Aquiétate y sabe!

¡Aquiétate!

¡Sé!

¡YO SOY EL QUE YO SOY!

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