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Las Cartas de Shamballa
VOLUMEN 12, Número 33 Agosto 17, 1990
Amados Seres:
¡Ofrezcan a Dios todo lo que tienen! ¡A veces son penas, otras son alegrías, pero cualquier cosa que sea la Verdad de vuestro corazón en ese momento – eso es lo que deben ofrecer a la Presencia de Dios “YO SOY”!
No pueden hacer nada de ustedes mismos para cambiar las condiciones, ya sea dentro de ustedes o en el mundo alrededor. Estas condiciones, aunque puedan ser el resultado del uso erróneo de la energía y meramente una ilusión, forman el mundo al que han venido a aprender la maestría sobre la propia energía de vida.
Vuestro deseo es hacer las cosas correctas – para resolver los problemas de este mundo y por ese deseo del corazón, Yo los bendigo. Ofrezcan este deseo al Cristo interno.
El entrenamiento de los cuatro vehículos inferiores es todo consumidor. Es el por qué están aquí. Sin embargo, deben, como nosotros hemos hecho antes que ustedes, elevarse sobre ello para sanar verdaderamente.
Pongan todo lo que tienen – que es todo lo que son – sobre el altar del Dios Viviente que mora dentro del corazón. Este, mis hijos, es vuestro sacrificio. Es verdaderamente la única cosa que tienen y mediante el libre albedrío deben dárselo a Dios. ¡Sólo en esta forma liberan al Cristo interior para que sea el Sanador!
¡Recuerden, un verdadero sacrificio hace la vida –por lo que esto es dado - sagrada! Un sacrificio debe ser dado libremente, porque esa es la naturaleza de su ser. Si dan algo con la esperanza de retorno, ese no es un sacrificio. Sólo vuestro amor, dado por ustedes libremente, hace posible formar el sacrificio que pueden ofrecer al Cristo interno. ¡Este es la verdadera sanación de la vida porque libera al Cristo para hacer el trabajo que vino a hacer! Este es el significado de la enseñanza: Dios es el Hacer, el Hacedor y el Hecho.
Den todo al Cristo dentro del corazón y sepan que cuando esto es hecho completamente, la sanación también está completa.
Vuestra amigo de la Luz
Kwan Yin