VOLUMEN 11, Número 39                                                                                                                                   Setiembre 25 1989

Amados Discípulos: 

Muchas veces cuando vuestros corazones están atribulados por situaciones que han llegado a vuestras vidas, el llamado sale por específico consejo. 

Queridos seres, como vuestro Maestro, mi Amor y Confort siempre fuyen en respuesta a cada pedido. Sin embargo –como con cualquier ecuación que es puesta ante ustedes como estudiantes, si el maestro da la respuesta, ustedes no han aprendido el proceso por el cual la ecuación puede ser resuelta. 

El progreso sobre el sendero está basado en la voluntad para buscar la propia solución. Esto también explica la razón por la cual otra parte de vida no puede resolver vuestros problemas. Hacerlo así les robaría toda posibilidad de adquirir la maestría sobre la propia energía. 

Si entendieran y pudiesen describir vuestro problema a otra persona – y esa persona pudiese darles la respuesta – podrían carecer de la habilidad para resolver el problema propio. Esto sólo significa que el mismo problema  reaparecería. 

¿No han buscado - en las experiencias pasadas - el consejo de una persona para escuchar su opinión, y luego una segunda y otra y todavía de una tercera persona bien intencionada, hasta que se encontraron perdidos en una total confusión en cuanto a qué opinión – si alguna – seguir? Yo no les digo que nunca deberían buscar consejo pero si sólo sienten confusión como resultado, esto significa que todavía no han entendido el propio problema. 

Entre el problema y la solución yace el principio y hasta que éste no sea descubierto, ningún problema es perdurablemente resuelto. Esta es la razón por la cual nosotros no interferimos con la conciencia personal de aquellos aún no ascendidos. Más bien, damos nuestro entendimiento, nuestra sabiduría y el sostenedor poder de nuestro Amor para reforzarlos cuando buscan el principio involucrado en las situaciones individuales. Así cuando encuentran la `causa y núcleo´ de cualquier situación problemática deben resolverlo por sí mismos y es logrado otro paso en la maestría personal. 

¡Los bendigo con el sostenedor poder de mi Amor y Paz y ustedes muévanse siempre hacia adelante en la Luz! 

Pablo, el Maha Chohan