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Las Cartas de Shamballa

VOLUMEN 9, Número 19                                                                                                   Mayo 12, 1987

 

El Morya 

Saludos, Mis Amados Amigos de las Edades, Yo los Amo. 

Desearía esforzarme para animarlos a que todos entiendan y realicen el poder que tienen en el control de los propios cuatro vehículos inferiores a través de la respiración correctamente controlada, al inspirar, absorber, expandir y proyectar las virtudes de la Divinidad por todo el propio ser y para toda vida en todas partes – una silenciosa bendición para toda vida. Consideren la tremenda oportunidad que tienen para calificar cada aliento que entra a vuestros pulmones con Divino Amor.

Al inspirar, pueden atraer la sustancia de los cuatro vehículos inferiores hacia la Sagrada llama de Eterna Verdad dentro de vuestro corazón, sublimarla allí y absorberla y al liberar la respiración pueden expandir esa Sagrada Llama y conscientemente proyectarla mediante la propia energía rítmica y hacia la atmósfera, alimentando todo con la Divina Cualidad o virtud contenida dentro de esa Sagrada llama de Eterna Verdad. 

Dentro del propio corazón está la chispa potencial de todas las Divinas Virtudes de cada Retiro alrededor de este Planeta, incluyendo el Poder de la Resurrección. 

La práctica de la respiración controlada que NUNCA es ESFORZADA sino siempre, suave, gentil y rítmica, les permitirá resucitar la alegría, el optimismo, la felicidad, la vitalidad, el amor y la perfección de Divinos seres libres en su Servicio a toda vida. 

Es el Divino Edicto que todos los hombres puedan convertirse en Maestros de Amor en su verdadero sentido y recordar que no hay corriente de vida en todo el Gran Universo de Dios que no sea de alguna forma un Dispensador del Divino Elemento del Amor. 

El Morya

 

 

 

 

 

 

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