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Las Cartas de Shamballa
VOLUMEN 8, Número 50 Diciembre 16, 1986
Madre María
Yo específicamente deseo atraer vuestra atención a la Hueste Angélica. La gente
por la mayor parte piensa de la Hueste Angélica, oh, como hermosos Seres, pero
de los chelas se espera que reconozcan y sean agradecidos por el poderoso
servicio que tenemos al dar al Planeta Tierra el Amor y la Luz de los regalos de
Dios Padre-Madre que nos han sido dados a cada uno de nosotros en el Reino
Angélico… y privilegiada Yo soy, un humilde Ser, de Ser un miembro de ese Reino.
Los Cielos alrededor y en cada lugar donde está siendo dada la atención a la
gloriosa música enviando su Radiación, la Hueste Angélica es un sentimiento de
Amor que fluye desde los corazones del hombre. No es maravilloso saber que que
la Hueste Angélica está deleitada por este servicio, y en caso de los dedicados
chelas que se están esforzando en volverse el Cristo en Acción… y así como
ustedes ayudarían a un niño para que aprenda a hablar, nosotros en la Hueste
Angélica deseamos mostrarles la dignidad y la pureza de motivo y espíritu que
son requeridos para hablar y caminar con los Ángeles.
Envolviéndolos en el Amor de la Hueste Angélica.
“YO SOY” María