1
Las Cartas de Shamballa
VOLUMEN V, Número 18 Mayo 3, 1983
(Recibido durante una tormenta el 16 de abril de 1983, Epidaurus, Grecia)
Amado Señor Asclepius
Sientan mi Presencia en vuestro medio. Con frecuencia los individuos
no entienden la actividad de los Elementos. ¡Escuchen ese gran sonido del trueno
yendo a través del Universo, llevando la felicidad de mi Ser!
Muchos me asocian, y correctamente, con la sanación. Hay muchas
opciones en cuanto a qué realmente significa “sanación”.
Actualmente, es el cambio de la acción vibratoria de vuestro ser en Uno
con la Armonía, porque en Armonía con el Verdadero Ser nada puede entrometerse.
Es más conveniente, para aquellos que lo requieren, tomar alguna medicina
prescripta, sea líquida, en tabletas o de otra forma. ¿Por qué piensan ustedes
que hablamos del poderoso Hilarión y su Actividad de sanación? Si no fuese
necesario para algunos tener esa forma de asistencia no podríamos dar especial
ayuda a los doctores y nurses.
Las manos usadas en sanación – y Yo no quiero decir las manos juntas
– sino una mano suave, donde el mismo Amor y el fluir de la vida de la armonía
de vuestro ser fluyen a través del recipiente, trae alivio. ¿No mecemos a un
bebé para que duerma? Eso es Armonía. Es movimiento. Es verdaderamente Amor en
acción.
¡Ahora hay muchos practicantes en este planeta que
se permiten el lujo de usar métodos de sanación que son de las fuerzas
oscuras! YO LES ACONSEJO queridos iluminados chelas, no permitan que la dulzura
con la cual ellos primero los ungen y luego en una forma insidiosa los CONVENCEN
de que – ¿“oh, no es eso hermoso”? ¡SEAN CUIDADOSOS! ¡SEAN CUIDADOSOS! ¡Sean lo
suficientemente sabios para no permitir que eso suceda! ¡Las fuerzas oscuras
pueden sanar, pero ellas demandan un rescate desde el Alma!
Escuchen aquellos tonos yendo a través de los éteres y cuando sale
un tono se reúne con otro. Yo hago una pausa por un
momento para que escuchen y sientan, la armonía y las bendiciones de los
Elementos mientras ellos envían hermosa música a través de vuestros seres.
Es el expreso deseo de la Jerarquía Espiritual que nuestros chelas
aprendan y pongan en práctica las distintas formas de sanación que ha sido la
costumbre en nuestro poderoso Foco
aquí en Epidaurus. Oh, queridos seres, la sanación a través de la música y el
movimiento – porque la Armonía es gozosa y fluye a través de vuestros seres,
uniéndose con otras que están comprometidas en una similar vibración. Existe
sanación en deportes – los deportes de una hermosa
y compasiva naturaleza.
Existe sanación en la meditación, en la canción, en la palabra hablada, y en la
contemplación profunda. ¿Quieren ustedes, dentro de vuestros corazones, tomar
una promesa mientras les aconsejo poner en práctica en vuestras distintas áreas,
donde sea posible, lo que la verdadera sanación realmente significa? Esto no es
lo que ustedes llaman un “Arte Antiguo”. Esto es eso con el cual el mundo
comenzó. En Amor fue creado este
planeta y todos los otros sistemas de mundos. En Amor se tornarán. ¿Y cómo lo
llamaremos? Cada uno de ustedes sabrá desde el mismo latido del pulso de vuestro
propio corazón, desde la ternura del optimismo y desde la felicidad, sólo lo que
Yo quiero decir. Oh, amados seres – y me refiero a ustedes en esa forma porque
el Amor nos une a todo juntos en una unidad – y no es sólo por las
circunstancias que ustedes llegaron a esta isla y a esta completa sección de
Grecia, porque en los éteres y en las páginas escritas, y en otras formas, allí
pulsa la propia LUZ de la VERDAD y en la Verdad ustedes tienen todo lo que es
requerido para adelantar en la Luz.
Desplieguen las alas de la radiación de vuestro ser y permitan a los
transeúntes sentir – puede no ser físicamente – pero ellos sentirán una
bendición y mientras ellos lo hacen así esta bendición pasará, reunirá un
momentum y momentum y momentum, como la bola de nieve e irradiará Luz a todos.
Permitan que vuestra radiación lleve el Amor de nuestro Foco y todos los otros
Focos de Grecia, que permanecen en su totalidad en los éteres, esperando ser
bajados una vez más. Y ¿quién puede hacer esto? ¡Los individuos como ustedes!
Ustedes, que antes han prometido asistirnos ante el Todopoderoso.
Y diciendo esto, Yo los bendigo
con la Luz Universal, de la cual soy una parte. Gracias por vuestra
atención.
Amado Señor Asclepius