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Las Cartas de Shamballa

 VOLUMEN 20, Número 23                                                                                                                          Junio 4, 2001

Amados seres: 

Envueltos en la amorosa radiación del Espíritu Santo y focalizando el Sagrado Aliento de Dios ¿cuál ha sido hasta ahora la experiencia en el mes? ¿Se han vuelto más concientes de los patrones de respiración, durante las específicas actividades diarias y no sólo durante el tiempo de meditación y silente comunión con Dios? ¿Están encontrando que son más expertos en la habilidad de respirar profundamente, expandiendo el pecho y llenando más plenamente los pulmones? 

Yo hago estas preguntas para hacerlos pensar  sobre lo que está sucediendo dentro de ustedes. Por ahora, con la asistencia de la adicional actividad de la respiración rítmica, ya deberían estar experimentando un mucho más elevado nivel de conciencia que les permitiría ir a un nivel mucho más profundo durante las meditaciones. La razón de ello es, de acuerdo con el Santo Æolus: *“Vuestra respiración es vida calificada, atraída hacia el cuerpo, investida con la sustancia de la conciencia y exhalada de nuevo para contribuir a la herencia de la raza, para bien o para mal, de acuerdo con el estado de esa conciencia… 

Cuando acuden por el aliento al Dios Universal, se les da una concesión de vida pura que entra por la nariz, para ser calificada por la conciencia de vuestros cuerpos. Cuando sostienen la respiración dentro del cuerpo físico, los cuerpos internos vierten el color de su conciencia en el aliento, y cuando exhalan, el aliento calificado se convierte en un puente de real energía que se conecta con el punto de conciencia hacia el cual lo dirigen. 

“La asimilación y expansión de la llama se logra a través de la respiración. Al estudiante despierto se le enseña el valor de la respiración profunda y rítmica y es a través de la conciente participación en pensamiento, sentimiento y respiración rítmica, que esta mezcla de conciencias, humanas y divinas, tiene lugar.” 

Amados seres consideren las palabras el amado Æolus mientras continúan pasando tiempo en el Gran Silencio y trabajando esta semana con el Sagrado Aliento de Dios.

Maestro Kuthumi

 

 

 

 

 

 

 

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