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Personal Comunión con

La Poderosa Llama de la Ascensión

Confortablemente sentados en el Santuario del foco físico de Shamballa, sientan la gran efusión de la poderosa Llama de la Ascensión. Experimenten su poderosa radiación envolviéndolos en una magnífica capa de pureza y alegría. Mientras vuestra atención continúa focalizada sobre esta llama, la conciencia es rápidamente  elevada y ustedes se vuelven uno con su boyante, elevador poder. 

     Respirando profundamente se hacen concientes de la presencia de dos ángeles vestidos con finas túnicas de resplandeciente, cristalina sustancia blanca, y hasta que la vista se acostumbra a esa gran luz, deben resguardar sus ojos de sus presencias. Después de unos pocos momentos, amorosamente los invitan a ir con ellos.  Cuando se extienden para tomar sus manos, suavemente se elevan hacia delante y flotan a través del umbral del Santuario Principal hacia el vestíbulo. Bajan los escalones y silenciosamente viajan a través de la pradera. Cruzando la calle ahora entran a la sagrada propiedad del Foco de la Ascensión. 

     Pasando a través de la estructura física de la entrada, rápidamente encuentran el camino hacia la puerta del Cuarto del Ángel. Se detienen para hacer un momento de preparación personal y cuando están listos, entran en  este sagrado foco de viviente luz. Mirando hacia arriba, notan que el cielorraso está hecho de una hermosa cristalina resplandeciente luz. Continuando con el foco de la atención en alto,  encuentran que vuestra conciencia sin esfuerzo  ha pasado a través de esta sustancia hacia un más alto plano etérico. 

     Más allá de ustedes, quizás por primera vez en vuestra vida, la verdadera realidad y magnífica perfección del centelleante alabastro blanco del Templo Central de la Llama de la Ascensión permite vuestra contemplación y por un momento su belleza los deja sin aliento. Una vez más, vuestros ángeles amigos amorosamente los guían, esta vez hasta doce iridiscentes escalones de oro y blanco mármol que son la parte externa de la entrada a la Sala de la Llama, donde deciden sentarse un momento en silente meditación para aclimatarse al más alto nivel vibratorio de la energía de este sagrado y santo lugar. 

     Sintiéndose listos, ahora se paran y entran  al verdadero centro de este antiguo foco de gran luz, donde ven ante ustedes el gran altar sobre el cual descansa una preciosa copa de cristal grabada con la hermosa escritura del lenguaje de los ángeles. Adelantándose, levantan este sagrado cáliz y mientras lo hacen, un profundo amor y reverencia por toda vida les colma el corazón, llenando el alma de gratitud por habérseles permitido  entrar  a  este sagrado lugar. 

     De pronto oyen la más dulce voz que han escuchado pidiéndoles que “Beban profundamente  de ese sagrado elixir de vida.” Mientras lo hacen,  la elevación  y gozo de la Llama de la Ascensión colman cada célula del cuerpo físico, continuando hacia vuestros vehículos etérico, mental y emocional. La divina esencia  contenida  en esta copa es ahora absorbida por cada parte de vuestro ser y mundo y agradecidamente aceptan que ustedes verdaderamente son UNO con este sagrado elixir. 

     Completada esta Santa Comunión, están ahora purificados, balanceados y sanados, capaces de ver el magnificente amor y luz de Dios que ya existe dentro de ustedes. Deseando expandir estas cualidades Divinas para abarcar a todo el mundo, les piden a sus dos ángeles que los guíen de regreso al Santuario desde donde vinieron. Para vuestro deleite, encuentran a dos hermosísimos Serafines guardando el altar. Entrando a un estado de profunda meditación, escuchan las melódicas voces de los ángeles: “¡Sereno Palacio en la colina! ¡Sereno silencio oh, qué calma! ¡Paz y Amor, esta es la Voluntad de Dios! ¡Uno Contigo - todo ahora- todo sereno!”  

     Sintiéndose totalmente centrados y relajados, mientras el coro angélico continúa cantando esta hermosa canción, vuestra atención ahora retorna plenamente a la ubicación física estando agradecidos por esta magnífica experiencia con la Llama de la Ascensión.