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Visualización para

la Llama de la Restauración 

     Sintiendo un insondable y profundo deseo de asistir en la expansión de la Llama de  la Restauración en la entera familia del hombre, entran en vuestro lugar de meditación, y se sientan confortablemente. Después del reconocimiento de vuestra Presencia Divina vistiendo el manto de luz y activando el sagrado Fuego Violeta interior, inmediatamente invocan el pleno dominio del Santo Ser Crístico y piden asistencia en la realización del pedido para  restaurar el planeta Tierra. 

     Respirando profundamente, se vuelven concientes de que vuestro grupo de ángeles los está rodeando. Mientras reconocen  su presencia con amor y gratitud, vuestra cruz de Llama Azul es activada y expandida, formando un invencible campo de fuerza de protección alrededor de ustedes. Inspirando al unísono con vuestros ángeles de protección y restauración, ustedes son suavemente elevados a los planos etéricos sobre vuestra residencia física, volviéndose uno con el Cuerpo de Luz. Desde donde están ubicados, a través del regalo de visión interna, ustedes pueden ver esta vasta red de luz, rodeando el planeta. Donde residen los compañeros trabajadores de la luz, ellos también, se vuelven visibles ante vuestra vista, y ahora se dan cuenta de la unidad de amor y deseo para servir que los conecta con todos los trabajadores de la luz por todas partes.  

     Vuestras cruces de Llama Azul se expanden y salen hacia esta vasta red de luz, conectándolos unos con otros y, mientras los ángeles intensifican vuestra luz, el color del rayo sobre el cual ustedes sirven se vuelve más definido. Vuestros individuales regalos espirituales ahora comienzan a fluir entrando al Cuerpo de Luz, y ustedes comienzan a respirar rítmicamente, intensificando vuestro propio regalo contemplando como se mezcla con los regalos de vuestros co-servidores. El Cuerpo de Luz ahora pulsa con los colores de los siete rayos cósmicos, y vuestro corazón se llena de amor y gratitud por ser una parte conciente de esta unificada actividad de hermandad. 

     Un rayo de dorada luz desciende desde el corazón del Gran Sol Central para envolverlos a ustedes y al entero Cuerpo de Luz, y el poderoso Arcángel de la Restauración se hace visible a vuestra visión interna. Cuando Él dirige su llama, legiones de sus ángeles descienden reuniéndose con los siete poderosos ángeles de la restauración, quienes han permanecido en la atmósfera de la Tierra por muchos años, esperando nuestras llamadas por asistencia. 

     Respondiendo al silente comando del Arcángel de la Restauración, el entero Cuerpo de Luz ahora respira al unísono, inspirando y absorbiendo – expandiendo y proyectando el transmutador poder del Fuego Violeta hacia toda vida en la Tierra. Inspirando otra vez, la pura luz blanca de la Llama de la Restauración, entra en nuestros chakras  coronarios y desciende a nuestros centros corazón. Mientras absorbemos esta llama, los azules rayos láser dentro de él, penetran cada electrón de nuestros seres y mundos, restaurándolos a la perfección de nuestros planes divinos. Nosotros exhalamos, expandiendo y proyectando esta sustancia a toda vida sobre el planeta Tierra. Unidos en conciencia, sabemos que estamos proyectando la Llama de la Restauración hacia los seres y mundos de todos nuestros hermanos y hermanas de la única Familia del Hombre. 

     Nosotros continuamos con nuestro suave, rítmico patrón de respiración mientras  visualizamos la intensa actividad del Fuego Sagrado teniendo lugar en nuestro planeta en este momento. La pura cristalina Llama de la Restauración fluye dentro y a través del Cuerpo de Luz hacia toda vida en la Tierra y, mientras los azules rayos láser ahora también penetran a cada persona, la perfección de su propio divino plan es despertada y activada al grado en que ellos pueden absorber. 

   Nosotros sabemos que cuando la purificada energía de toda vida es cargada con la Llama de la Restauración, cada singular corriente de vida aceptará y expresará, sostendrá y mantendrá un más pacífico y amoroso estado del ser, donde fuere ella pueda estar sobre la Tierra. Nosotros sabemos que esta llama los ayudará a transmutar y elevarse sobre cualquiera de las condiciones que encuentren en el camino de la  verdadera  unidad  y hermandad con  la entera  familia del hombre. 

     ¡Colmados con esta seguridad, vean a esta purificada energía cargada con el pleno momentum de renovación espiritual y restauración, como surge del mar de la conciencia masa como pura blanca luz, iluminando la entera Tierra con su radiación! ¡Cuando estas purificadas energías son retornadas al origen cósmico de toda vida, sientan la luz, amor y paz,  descendiendo desde esa esfera! 

¡Nuestra llamada por restauración resuena por toda la Tierra! El amor por nuestros  hermanos y hermanas los ha alcanzado y los rodea con armonía y paz. En lo profundo de vuestro propio centro corazón, silenciosamente ofrecen gratitud por esta experiencia, y mientras la conciencia gentilmente retorna a la locación física, ustedes escuchan la bendición: “¡Así es, amado YO SOY!”