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Meditación
Tomen unos pocos momentos para volverse concientes del Santo Aliento. Sólo inspiren y exhalen, permitiéndose estar en paz y relajados. Dentro de vuestro ojo mental vean una luz verde brillante. Crece más y más brillante expandiéndose hasta que ven una resplandeciente esfera cristalina dentro de esta Luz. La esfera es el planeta Tierra.
Ahora hay legiones más legiones de Ángeles colmando la atmósfera, arriba y a vuestro alrededor, tan lejos como alcanzan a ver. Suavemente, ellos se elevan y ustedes sienten un gran deseo de unírseles. Concentrándose en estos gentiles Seres, son elevados, conectándose y trabajando como uno con ellos.
Siéntanse bañados en olas tras olas de protección, purificación y todas las otras Puras Cualidades Divinas que ellos proyectan. Sienten cómo a través de ustedes pueden permanecer allí para siempre. Sintiendo un gran deseo de asistir en su trabajo miran hacia abajo y ven la Tierra completamente purificada, rodeada dentro del resplandeciente campo de fuerza de Sagrado Fuego Violeta.
Elevándose desde la Tierra, ven una pirámide ante vuestros ojos. En la cima, una luz verde esmeralda con una radicaicón cristalina resplandece y crece, irradiando poderosos rayos de Luz. El Amado Vista, el Ojo Todo Avisor de Dios, ahora espera vuestra asistencia. Mirando alrededor, notan que todos los Ángeles han focalizado su completa atención sobre estos rayos de Luz. Saben que Ellos están preparados a fin de realizar un gran servicio para el Planeta. Se vuelven concientes de lo que están haciendo y saben que ustedes pueden ayudar. Juntos se concentrarán en cada Rayo – siete en total – inspirando las Cualidades de cada Uno de ellos en vuestro Ser, absorbiéndolas, expandiéndolas y proyectándolas hacia toda vida con cada exhalación. Sientan vuestras energías y vuestro amor, fusionándose con las suyas mientras comienzan:
Concéntrense sobre el Poderoso Rayo Azul de la Voluntad, Fe, Poder y Protección de Dios.
Concéntrense sobre la Fe, diciendo en vuestra mente:
* “¡YO SOY Fe!” (*X3) Envíen Fe…
Concéntrense sobre el brillante Rayo Dorado de Iluminación y Sabiduría.
Concéntrense sobre la Luz, diciendo en vuestra mente:
* “¡YO SOY Luz!” (*X3) Envíen Luz…
Concéntrense sobre el suave Rayo Rosa de Puro Amor Divino de Dios, diciendo:
* “¡YO SOY Amor!” (*X3). Envíen Amor…
Concéntrense sobre el espiralante Rayo Cristalino de Divina Pureza, diciendo:
* “¡YO SOY Pureza!” (*X3). Envíen Pureza…
Concéntrense sobre el resplandeciente Rayo Verde de Verdad, Consagración, Concentración y Sanación de Dios, diciendo:
* “¡YO SOY Verdad!” (*X3). Envíen Verdad…
Concéntrense sobre el Rayo Oro-Rubí de Paz y Ministración, diciendo:
* “¡YO SOY Paz!” (*X3). Envíen Paz…
Concéntrense sobre el Purificador Rayo de Libertad Espiritual, Misericordia, Perdón y Transmutación, diciendo:
* “¡YO SOY Libertad!” (*X3). Envíen Libertad…
Ahora retornen vuestra atención al Gran Rayo Verde de la Verdad sabiendo que toda vida en la Tierra ha sido despertada a la Verdad de este trabajo, así toda la sanación necesitada puede tener lugar y cada corriente de vida ahora pueda ser consagrada al trabajo que debe ser hecho para que la Tierra sea la Santa Estrella de la Libertad.
¡Mientras vuestra atención retorna a la ubicación física, saben que han sido convocados para ser la Presencia del Cristo y aceptan esa Presencia ahora y para siempre!
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